Machismo presente en la cultura

Cuando se piensa en lanzar un negocio con la Base de la Pirámide como mercado objetivo es importante entender que estas familias funcionan de diferente manera a otras procedentes de sociedades más estructuradas con personas más educadas. Lamentablemente puede existir la creencia que el hombre es más importante que la mujer y los niños. Principalmente es importante entender que de los productos y servicios que tienen la mujer como mercado objetivo el hombre también tendría influencia muchas veces en el decisión comprar. También, Así como existe estos aspectos de la cultura, algunos programas, servicios, y productos que normalmente funcionan en mercados como los EEUU, Europa, etc. no van. El machismo tiene más impacto en situaciones así y a veces es necesario modificar las prácticas de los negocios para adaptarse a este mercado.

Nansi Bustamante tiene diez años trabajando con sus clientes de la base de la pirámide con partos naturales. Ahora está poniendo en marcha su propio negocio – Casa de partos “Wawachay” – que ofrece atención prenatal y de parto más humanizado, la cual ofrece mejores condiciones que los partos en casas, práctica prevalente en mucha gente BdP. Tristemente, aunque existe la opción de dar a luz en un hospital, mucha gente no la utiliza porque no se siente cómoda ya que la medicina occidental no se adecúa a sus costumbres. El peligro de la situación es que la higiene en las casas no es adecuada para un parto. La dificultad que Nansi encuentra con sus clientes es que necesitan bastante educación para cambiar su comportamiento y mejorar su alimentación e higiene. Algunos pacientes mantienen costumbres en el embarazo que son dañinas para la salud. Por ejemplo, ella explique “en lo que es el embarazo hay que educarlos en nutrición. Normalmente las mujeres se enfocan en maximizar ahorros y por eso a veces se sacrifican y no se alimentan lo suficiente. Piensan que sí se pueden nutrir con poco dinero. Caldos en general son parte de su costumbre. Las amas de casa hierven huesos de carne de res en agua y piensen que es sano.” Por la falta de dinero Nancy ha descubierto que las amas de casa a veces no se alimentan bien para limitar gastos y proveer a sus familias.

Encima del problema de malnutrición que prevele en su comunidad de clientes, Nancy cuenta que por machismo dan preferencia a los hombres lo que exacerba el déficit de nutrición que tienen las mujeres embarazadas, que realmente empieza de joven. “Es una cultura que se enfoca más en el hombre”, ella dice. “Hay mucha anemia en los niños, especialmente las niñas. Ellos dan preferencia a los hombrecitos. Por eso (las mujeres) tienen déficit o anemia cuando se embaracen.” Sobrepasar este desafío, requiere una labor educativa bien fuerte para Nancy. Ella ha identificado que la estrategia que funciona mejor es involucrar el hombre en el proceso de planear para el parto. Ella se ha dado cuenta que si trabaja solo con las mujeres los cambios no se dan porque las decisiones las toman los hombres en la casa. Ella ve resultados cuando educa a los miembros de la pareja (hombre y mujer). Pero hay que ser perseverante en educarles sobre la importancia de la nutrición para la mujer. “Eso siempre estoy incidiendo,” Ella dice. “Repitiendo y repitiendo…hay que perseverar en la información porque es bien difícil que cambien su esquema mental. Ir y perseverar. Hay que informarlos.”

Después de 10 años trabajando con la BdP Nancy se ha establecido como figura de conocimiento y tiene la confianza de su mercado objetivo para su nuevo negocio. Los frutos de su labor se están propagando ahora porque sus clientes del pasado también están informando a sus vecinos sobre la importancia de la higiene, nutrición, etc.